sábado, 13 de septiembre de 2008

Sueño un sueño que sueña

Hay una línea que me escinde de mi misma y me gusta jugar en las hojas, en el ángulo, ahí de donde puede resbalarse. La madre nerviosa la centra, la media, me media una línea de colores y llena de lunares. Te doy ahora un sueño que puede ser mar, un sueño que lleno de tambores y ruidos sordos. Porque tengo una línea que me escinde y me divide en aguas. Incorpórea se puede ser, donde todo es una red entera y nudosa, rugosa, como papel corrugado. Te regalo esto que guardo entre los pliegues de mi mente, te doy esto con el puño cerrado porque es un gusano que me quema la piel. Porque me gusta ser mulatona y me descubro negra, negra en mi sangre azul. No hay olores. Es un mundo dividido en el blanco de la hoja, un sentido ramificado en mil sabores. Mi hoja no tiene lengua, no tiene letras. Mi hoja es estructura pura, presa de la incongruente indecencia inodoro que recicla caricias. Dejame ser. Dejame ser puras sensaciones que no tengo otra cosa para regalarte ni para poner debajo del árbol...

4 comentarios:

El Rey De Los Hotros dijo...

Disculpame, pero no entendí nada. O sea, es muy ambiguo. Y suena interesante. Solo una palabra: ¿De qué hablás? Contestando eso, dejame a mí que mastique el texto de vuelta. Thanx!

pezpájaro dijo...

con tu hoja caida, y negra, y caida, se hacen mil arboles mas... quizas nunca los conozcas.
es lindo pensar asi, porque el misterio seria infinito.

N i n a dijo...

Para Der Unbekannt


De chica solía soñar con una hoja que era todo lo que había en el mundo y en el ángulo inferior izquierdo me escondía ínfima asustada. Arriba de la hoja solo había dos líneas negras con un nudo en su intersección y se movían generándome vértigo. No hay nada que entender, los textos hablan por sí mismos, pero si te contesta la pregunta, no es una cuestión de intención sino de algo, una imagen en este caso, que me inspiró.

Darío Mira dijo...

Vi una expresión sin filtros, donde se generan imagenes que llegan a lugares intimos de uno. Me hizo bien leerte, que no se pierda la constancia de Ser.